domingo, 21 de noviembre de 2021

Para Francisca...

Mi querida Francisca, al fin te has ido.
Cogida de mi mano, como liberándome de un peso y confiándome un secreto que ni tú sabías, pero que yo si.
Como heredera de tus heridas prometo sanarlas todas. Dedicaré a ello mi vida.
No abrá más abandono, te esperan almas amorosas y ansiosas por darte calor. 
Y allí está tu madre, esperándote y deseando abrazarte. Todo este tiempo sin verla desaparece. Vuelves a ser su pequeña, su Francisca.
Y tampoco hay vejez ni enfermedad, tus achaques desaparecen. Ya no hay dolor.
Y allí respiras sin dificultad, puedes danzar como un hada e incluso volar. Que alegría más inmensa me da. 
Eres libre al fin de esta vida de dolor y miserias, vida que como alma valiente elegiste para evolucionar. Gracias por irte agarrada de mi mano. Gracias por ese regalo. Cojo el relevo y en conciencia sano el linaje y libero al clan. Este clan de mujeres maltratadas y vilipendiadas en su orgullo y en su dignidad. 

Adiós Francisca, te quiero mucho...



No hay comentarios:

Publicar un comentario

Comenta esta entrada.